Memorias De Un Secuestro
La narración contenida en este libro constituye en gran medida los recuerdos de la autora, hilvanados con posterioridad a su rescate del lugar donde permaneciera durante dos meses, veintidós días, dieciocho horas y cuarenta minutos. En ella, la autora va hilvanando su rutina de vida con posterioridad a la salida y retorno a la normalidad, con los hechos acaecidos desde que saliera de su hogar el día del secuestro con los suscitados en el lugar de confinamiento hasta el día de su rescate. No se habla de ese día porque de allí solo cabe hablar de aprehensión, confinamiento o retención y rescate, entendiendo este último, como el producto de una operación comando integrada por funcionarios pertenecientes a diversos cuerpos policiales del Estado venezolano a nivel nacional y regional, ocasionando consecuencias fatales para el Guardián.
De manera muy sencilla y moderada, se refiere a los malos tratos y amenazas padecidas y a los videos efectuados por los secuestradores a los efectos de presentarlos como fe de vida a los familiares. Sus pesadillas, unas más lacerantes que otras, dado el impacto emocional causado al despertar de las mismas. En la misma tónica, se refiere a la decisión de los Tribunales de Justicia ante alguno de los participantes en este hecho y su regreso a la vida normal, su trabajo como presentadora de televisión, su pasión por el estudio y viajar, todo ello sin dejar de tocar, según su estilo acostumbrado, otros hechos de mayor o menor relevancia que le haya tocado presenciar o sencillamente, observados a través de la prensa escrita o de radio, de televisión o de lo que considera ya, su larga vida.
-- Clarisa Casals-Castillo